La historia nos enseña sobre el pasado, pero además, presenta todo con un enfoque prospectivo: da pistas sobre el presente y el futuro. De esta forma, todos podrían entender los procesos que antecedieron al presente y su relación entre sí.
Los estudiantes que saben de historia desde el colegio construyen otro concepto de lo que viven y podrían aportar, de una forma efectiva y real, a la construcción de una mejor sociedad.
La historia proporciona identidad
Una de las razones más importantes para el estudio histórico es que las naciones modernas propician enseñar historia porque construye identidad nacional. Esto se debe a que la historia incluye cómo se construyó todo lo que conocemos hoy en día, incluyendo países enteros y su completa evolución.
Formación de ciudadanos
No puede haber un buen ciudadano si no se forma a la persona con conocimientos sobre historia. No solo permite examinar el comportamiento y las situaciones en las que se han visto envueltos países y regiones, sino que además, estas mismas vivencias dan lecciones sobre valores y toma de decisiones.
También, permite conocer la interacción que tuvieron otras naciones y cómo sus ciudadanos reaccionaron en esos momentos, y así lograr ser un ciudadano comprometido.